Irati Xtrem desde el Albergue del Pirineo
El pasado sábado celebramos la Irati Xtrem 2012 con el ambiente habitual en Casa Iriarte, el Albergue del Pirineo, es el único alojamiento con categoría de Albergue que es “amigo de la Irati Xtrem. Desde Ochagavía, a 3 km de Casa Iriarte, el Albergue del Pirineo. La Irati Xtrem es una prueba singular dentro del calendario ciclista. El compañerismo, el esfuerzo, la bicicleta fundida al paisaje maravilloso de Salazar, el valle Escondido del Pirineo de Navarra. Os esperamos para la edición de 2013
Las elevadas temperaturas y la ausencia de incidentes marcaron la dura jornada
Mil doscientos ciclistas formando un río de bicicletas pasaron ayer a las nueve bajo el arco de salida de la 6ª Irati Xtrem, la marcha cicloturista no competitiva organizada por el Ayuntamiento de Otsagabia, Mendixut y Pirenaica, que recorre el espectacular entorno de la Selva de Irati.
Considerada por los expertos como una de las más duras de España, goza cada año de más prestigio y de un extraordinario ambiente del que ayer pudieron gozar los 1.200 deportistas procedentes de diversas provincias que participaron en ella.
Carlos Eguaras, de 44 años y José Luis García, de 45, de Sangüesa acudieron por tercer año y el de ayer era el segundo en el que participaban. La Irati Xtrem es para ellos «cicloturismo en estado puro, no competitivo, que les permite disfrutar de un día bonito y de un paisaje impresionante», afirmaban mientras se encaminaban hacia la salida. Acudieron especialmente en forma, aseguraron. «Es una carrera difícil, y para prepararla todos los kilómetros son pocos». Junto a ellos salieron Raúl Villanueva y Alfonso Balda, de Lumbier, que se estrenaba en esta edición. Más adelante, hacían lo mismo, Santos Nevado, Antonio Duarte y David Molinero, de Gerona. «Sabemos que es una marcha tan dura como bonita». Tercer año, sin embargo, para Paco Iñiguez, que acudió desde Logroño acompañado de Víctor Arribas. «Para mí es un estreno espectacular», expresaba. Su objetivo era claro: «Terminar lo mejor posible, pero terminar», y en clave de humor decían lo mismo, Carlos Tabar, César Díaz y Carlos Dallo, de tierra Estella, que participaban por vez primera. «A ver si llegamos al final sin que nos tenga que recoger el camión de escoba».
Para las ocho de la mañana ya había en Otsagabia un inusual movimiento, con la llegada, el reparto de dorsales y los bulliciosos y madrugadores niños, así como el pequeño almuerzo por gentileza de Lacturale, pastas Urrutia, y Etxenike,
Desde hace tres años, los txikis cogen protagonismo abriendo la marcha y crece la afición en el valle salacenco. La Irati Xtrem Txiki hace 2 km hasta Ezcároz, de forma tranquila y con mucha ilusión delante del pelotón. Así, se hace cantera, y se da pie a la inscripción de familias completas, como los Morriño-Apezteguia, de Donosti, instalados desde el viernes: Iñaki, Lierni y sus hijos, Eneko y Jon.
IMPOSIBLE SIN ELLOS Más de cien voluntarios y voluntarias hicieron posible el antes, durante y el después de la Irati. En este y otros grandes acontecimientos de Otsagabia, mezcla de afición y de agudizar el ingenio para sobrevivir en el Pirineo, tal como apuntaba, Iñaki Iribarren, ellos son imprescindibles. «Representan el pilar básico», afirmaba Gorka Bueno, de la organización. Como dato, la víspera prepararon seis mil sandwichs, y ochenta kilos de pasta para la posterior comida. Atienden los puntos de avituallamiento, el frontón a la salida y llegada, además de los aparcamientos. El 19 de mayo este año por vez primera celebraron el Día del Voluntariado de la Irati Xtrem en el que participaron 56 personas.
Otra novedad de esta edición fue la ampliación de recursos sanitarios. Así desplazaron 4 ambulancias, 14 motos y quads, 12 camiones, furgonetas, coches y 3 autobuses.
Como aspecto novedoso más allá de lo puramente deportivo, comentaba Gorka Bueno, la organización ha puesto en marcha el Plan Verde, cuyo objetivo es hacer que el evento tenga cada vez menor impacto ambiental en el recorrido. Lo más llamativo del proyecto es el dorsal verde que todos los participantes portaron con el lema, «Yo no tiro nada al suelo, ¿y tú?». La organización espera que se convierta en un símbolo de la Irati. Junto a esta, las marchas Irati Xtrem y Pirenaica, a y más de veinte organizaciones de diferentes especialidades deportivas han iniciado una campaña de mentalización para que nadie participe en un evento sin dorsal, por el perjuicio que entraña.
La Irati Xtrem es una de las jornadas insustituibles del año en Salazar, el Valle Escondido del Pirineo de Navarra. Miles de personas que nos han visitado como cada año que saben vivir guardando el entorno. Hoy lunes vuelven los sonidos de la naturaleza a colarse entre el silencio de los humanos. Así lo vivimos desde el Albergue del Pirineo.